La compra de coches eléctricos de segunda mano nunca ha sido tan asequible ni atractiva como ahora. Un estudio reciente de la plataforma CarGurus confirma que estos vehículos están ganando terreno frente a los coches de combustión.

Y no solo por sus precios cada vez más competitivos, sino también por una serie de ventajas que los convierten en la opción ideal para quienes buscan movilidad sostenible sin gastar demasiado dinero.

En un contexto en el que la transición hacia un transporte más limpio es cada vez más urgente, esta nueva realidad en el mercado de ocasión ofrece una oportunidad para quienes quieren subirse al coche eléctrico sin tener que afrontar los elevados costes de un modelo nuevo.

El mercado de coches eléctricos usados comienza a expandirse rápidamente

Es importante mencionar que la movilidad eléctrica ha dejado de ser un tema exclusivo para quienes compran un coche nuevo, puesto que los eléctricos de segunda mano han comenzado a consolidarse como una alternativa real, favorecida por una rápida depreciación que ahora juega a favor del consumidor. 

Antes, estos vehículos nuevos tenían un precio de partida alto que desanimaba a muchos compradores, pero la acelerada caída de su valor abre la puerta a una base mucho más amplia de usuarios. Además del precio, estos coches presentan otras ventajas que incrementan su atractivo. 

Por ejemplo, según el estudio, los eléctricos usados suelen tener un kilometraje inferior en comparación con sus equivalentes de gasolina o diésel. Esto se explica en parte por qué muchos de estos han sido utilizados principalmente en entornos urbanos, donde las distancias son cortas y el desgaste menor. 

Esto significa que menos kilómetros se traduce en menor desgaste, menos gastos en mantenimiento y una vida útil más larga, aspectos que debes tener muy en cuenta si piensas en comprar un eléctrico de segunda mano.

Asimismo, la diferencia de precio también es notable, y es que algunos modelos pueden llegar a costar hasta un 28% menos que sus versiones con motor de combustión. Esta brecha es un factor decisivo para que muchos conductores decidan apostar por el vehículo eléctrico, consciente de que acceden a tecnología avanzada sin tener que desembolsar tanto como antes.

Ventajas que van más allá del precio

Comprar un coche eléctrico no es solo cuestión de ahorro económico, sino también de beneficios prácticos. La conducción de un vehículo de este tipo es más sencilla y silenciosa, con menos piezas que pueden desgastarse y requerir mantenimiento. 

Al final, no dependes de combustibles fósiles y reduces significativamente la huella de carbono, un aspecto que cada vez pesa más en la decisión de compra. Además, los avances en las infraestructuras de carga, así como las políticas de incentivo estatal, están haciendo que conducir un eléctrico sea más asequible que nunca. 

Es por esta razón que ya no es raro encontrar puntos de recarga rápida en ciudades, carreteras y aparcamientos, lo que elimina una de las principales barreras que había para la adopción masiva. Además, la carga rápida está siendo igual de eficiente, y BYD está mejorando esta situación.

Eso sí, como en cualquier compra de segunda mano, hay detalles a considerar, por lo que es importante que revises bien el estado de la batería, la autonomía real y el historial de mantenimiento del vehículo. La tecnología avanza rápido y algunos modelos más antiguos pueden no tener las mejoras actuales en eficiencia o seguridad. 

Por eso, informarse y comparar ayudará a tomar la mejor decisión. Del mismo modo, es recomendable que pienses en la infraestructura de carga disponible en tu zona y en tus hábitos diarios de movilidad. No todos los eléctricos usados se adaptan igual a todas las necesidades.

El estudio de CarGurus desvela que nunca ha habido un mejor momento para considerar la compra de un coche eléctrico usado. No solo es una alternativa más económica, sino que además contribuyes a un futuro más sostenible y disfrutas de beneficios que ya no están reservados solo a los vehículos nuevos o de gama alta.

Al final, la movilidad eléctrica es una realidad que crece con paso firme, y puedes aprovechar esta evolución para acceder a una opción práctica, económica, pero sobre todo respetuosa con el medio ambiente. Cambiar a un eléctrico ya no es un lujo, sino una decisión inteligente.

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Etiquetas: Coche eléctrico