“Dragon Ball” es una de las franquicias más legendarias en toda la historia del anime, un referente absoluto que permitió que en décadas posteriores aparecieran trabajos como “One Piece”, “Naruto” y mucho más. Pero no es oro todo lo que reluce en una IP tan sumamente gigantesca como es esta. Por ello, seguidamente voy a dejar las que considero como las 5 peores decisiones que se han tomado en toda la historia de la franquicia.

Dragonball Evolution

Creo que no hace falta justificar demasiado el porqué de que “Dragonball Evolution” se cuele en este listado. Se trata de una adaptación completamente atroz a todos los niveles de la obra de Akira Toriyama, un largometraje que durante mucho tiempo contó con algunas de las peores valoraciones de usuario que se podían encontrar en Internet. ¿Por qué se dio la luz verde a un proyecto así? Seguramente la respuesta sea dinero, pero en este caso no sirvió ni para eso.

Lo único bueno que se le puede atribuir a esta aberración live-action, es que fue tan sumamente mala que llevó a Akira Toriyama a ponerse de nuevo manos a la obra para evitar que fuera el último recuerdo que teníamos de la franquicia. Y sí, es cierto que “Dragon Ball Super” no es perfecto, pero ha dejado momentos espectaculares que por suerte han conseguido opacar todo el daño que hizo “Dragonball Evolution” hizo en su momento.

La regresión de Gohan

Gohan pasó de estar bien cerca de convertirse en el rostro definitivo de “Dragon Ball”, a transformarse en un personaje tan débil que Freezer simplemente podía acabar con él en un abrir y cerrar de ojos. Con el tremendo potencial que había mostrado, el Gohan que nos encontramos en la primera etapa de “Dragon Ball Super” fue increíblemente decepcionante. Porque una cosa es que pierda poder por dejar de entrenar, pero otra bien distinta es que probablemente hasta Krillin fuera más poderoso que él entonces.

El problema de que se tomara la ruta por la que se optó con Gohan, por mucho que tuviera sentido alegando que su pasión en realidad es estudiar y proteger la naturaleza, es lo radical que fue. La representación de Gohan en los primeros compases de “Dragon Ball Super” roza lo patético, y seguramente de ahí que a medida que avanzara la saga esto cambiara por completo. El Gohan Bestia de ahora es uno que gusta mucho más a los fans.

Maltrato de personajes clásicos y transformaciones

La llegada de “Dragon Ball Super” se dio con toda clase de altibajos, puntos positivos y negativos que no encontrarían su equilibrio hasta más adelante. Y es que lo mucho que cambió todo lo que conocíamos sobre el universo de “Dragon Ball” provocó que tanto las transformaciones como los personajes más clásicos perdieran fuerza de una manera descomunal.

A pesar de que en ‘Z’ ya se había visto algo parecido, ‘Super’ fue la confirmación de que los Yamcha, Tenshinhan y compañía eran parte del pasado de la IP. Similarmente, de la noche a la mañana se nos dijo que las formas de Super Saiyan ya no eran suficientes, y que tocaba ceder todo el protagonismo de las batallas a las transformaciones derivadas del Ki Divino de los dioses y ángeles.

“Dragon Ball Super” fue demasiado disruptivo de primeras, y de hecho algunos de los arcos más recientes del manga han seguido limando asperezas de principios de la saga (como la participación más activa de los Guerreros Z en la saga de Moro). Aunque la novedad es bienvenida, “Dragon Ball Super” no supo cómo introducirlo todo debidamente, y eso le valió muchas críticas.

La pésima temprana producción de Dragon Ball Super

De nuevo, el principio de “Dragon Ball Super” quedó muy lejos de lo que uno podía desear para una saga completamente nueva de “Dragon Ball”. Esto es algo de lo que claramente se tomó noto en la más reciente producción de “Dragon Ball Daima”. Pero más allá de lo mencionado previamente, el otro gran inconveniente inicial de “Dragon Ball Super” fue, sencillamente, su pésima producción.

Es imposible olvidar la malísima animación de “Dragon Ball Super” sobre todo durante el arco del Dios de la Destrucción; absolutamente nada tiene que ver esa etapa del anime con lo que fue la recta final de “Dragon Ball Super” mediante el Torneo del Poder. Pero las prisas son malas consejeras, y el deseo de lanzar nuevo contenido de la franquicia sin la debida planificación acabó haciendo mucho daño durante bastantes meses.

La pérdida absoluta de los niveles de poder

Parece que “Dragon Ball Super” haya sido un absoluto desastre con todo lo que estoy citando, y aunque obviamente no es así ni mucho menos (a la vista están los resultados tan positivos que ha dado a la franquicia), como digo muchas cosas no supieron gestionarse adecuadamente. Otro gran error con “Dragon Ball Super” es que los niveles de poder acabaron saltando definitivamente por la borda, sin control alguno además.

El anime de “Dragon Ball Super”, buscando la espectacularidad constante, es de hecho el gran culpable de esto. Son muchos detalles acumulados, como la transformación de Super Saiyan 2 Rage de Trunks, el Kaioken Blue de Goku o el hecho de que se hiciera referencia a Jiren como alguien a la par o superior a un Dios de la Destrucción; muchos de los aspectos de “Dragon Ball Super” se fueron de mano rápidamente. Ahora, simplemente hay que entender que ya no se pueden realizar las gestiones de niveles de poder como antaño, pero ‘Super’ no supo hacer la transición adecuada con esto.

Tabla de Resumen del Contenido

Quiero hacer énfasis en que me parece que “Dragon Ball Super” ha sido un producto perfecto para revitalizar a “Dragon Ball” en tiempos recientes, y solo hace falta ver lo mucho que todos los fans desean que vuelva el anime para adaptar los arcos de Granolah y Moro. Pero hay que ser sinceros, y estos últimos 10-15 años dejaron tomas de decisiones muy cuestionables para el universo de Goku y compañía. Dicho esto, ¿te parece que hay algo peor que lo que he listado aquí?