Elon Musk siempre consigue acaparar titulares, casi siempre en negativo, debido a todas sus idas y venidas y, por supuesto, sus locas promesas. Por un lado, es innegable afirmar que es el hombre más rico del mundo y uno de los más influyentes en tecnología. 

Por otro, es el que más habla de salvar a la humanidad, de colonizar Marte y de asegurar que nuestra especie va a sobrevivir a cualquier catástrofe. Pero, mientras tanto, en la Tierra, y en la actualidad, sus decisiones están teniendo un impacto muy negativo y peliagudo en la vida de miles de personas.

La situación en países como Sudán del Sur, Somalia o Nigeria es realmente dramática. Con la llegada de epidemias como el cólera y el cierre de centros de salud por recortes en la ayuda que le estaba llegando de fuera, a muchas familias les está tocando caminar horas bajo un sol abrasador para intentar llegar a una clínica que todavía funcione. 

Ezibon Khamis, de Save the Children, cuenta cómo hombres y mujeres cargan a sus enfermos en camillas de cualquier manera, mientras niños y adultos está sufriendo las graves consecuencias de enfermedades que no se están tratando. 

Elon Musk y el fin de la ayuda internacional: mientras busca salvar el futuro está condenando el presente

El punto de inflexión llegó cuando Musk, a través de la organización DOGE, empezó a estar al frente de recortes en estos fondos. Desde ese momento la situación ha empeorado mucho. La desnutrición, las familias separadas y otras atrocidades son el pan de cada día de muchos países subdesarrollados.

Mientras tanto, el CEO de Tesla ha intentado justificar estos recortes diciendo que la ayuda internacional es ineficiente y que no hay pruebas de que su eliminación cause un sufrimiento real. Pero los testimonios de trabajadores humanitarios y las cifras de muertes y enfermedades muestran lo contrario. 

Musk, que no ha respondido a ningún medio sobre este tema, insiste en que sus haters no pueden demostrar el daño causado. Sin embargo, organizaciones como Save the Children, Médicos Sin Fronteras y la Elizabeth Glaser Pediatric AIDS Foundation documentan día a día cómo la falta de fondos está acabando con todo y dejando a miles de personas totalmente destruidas.

Mientras tanto, este sigue haciendo foco en su discurso sobre la necesidad de aumentar la población y colonizar otros planetas. Ha declarado que la humanidad está ‘muriendo’ debido a la baja natalidad y que, para salvarse, es necesario tener más hijos y expandirse a Marte. 

Según él, invertir en colonizar Marte o evitar pandemias futuras es más importante que ayudar a quienes sufren hoy. Desde luego, la falta de empatía del sudafricano es un tema complicado e incluso ha llegado a afirmar que esta característica en una persona es una ‘debilidad’ típica de la civilización occidental y que los políticos y activistas se aprovechan de ello. 

Considera que cortar la ayuda internacional es una forma de proteger a Occidente y de asegurar su futuro. Pero, como explica Catherine Connor, de la Elizabeth Glaser Pediatric AIDS Foundation, “todo está interconectado”. Cortar por un lado es cortar en general. 

El mensaje es claro y el futuro que Musk imagina es solo para algunos, mientras que otros, muchos, quedan fuera. 

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Etiquetas: Salud, Tesla, Elon Musk, Economía