Aquellos conductores que dependen de la navegación por GPS, utilizando aplicaciones como Waze o Google Maps, se veían siempre con el eterno problema de circular por los túneles de la M-30, donde directamente se quedaban a ciegas con este tipo de tecnologías.

Sin embargo, desde hace unas semanas, el Ayuntamiento de Madrid, a través de la empresa Madrid Calle 30, comenzó a desplegar un nuevo sistema de balizas electrónicas Bluetooth en los túneles.

Es decir, que esta tecnología ya permite que las aplicaciones de navegación, como las anteriormente mencionadas, sigan funcionando de forma precisa en el subsuelo, resolviendo así este problema histórico en la circulación por esta vía clave.

Para entenderlo: estas balizas se colocan cada 20 a 40 metros en los laterales de los túneles, sobre soportes de aluminio en las bandejas de cables. Cada una de ellas va emitiendo una señal Bluetooth que los navegadores pueden detectar y localizar.

Durante la configuración, se asigna a cada baliza su posición exacta, de forma que los distintos mapas digitales pueden acabar interpretando en qué punto del túnel se encuentra el vehículo.

Es decir, que a diferencia de las señales satelitales, que en túneles, garajes y espacios cerrados no consiguen atravesar las estructuras de hormigón, con estas balizas Bluetooth la cosa funciona distinto.

El GPS no funciona correctamente en estos entornos porque se basa en la trilateración de señales satelitales, es decir, en calcular la posición en base a la señal recibida desde al menos tres satélites distintos.

Así que el nuevo sistema instalado por el Ayuntamiento de Madrid es compatible con nuestras aplicaciones de navegación favoritas y se está integrando de forma progresiva.

De esta forma, se mejora la experiencia de conducción y se reducen los errores de navegación en uno de los puntos más críticos del tráfico en Madrid.

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Etiquetas: Waze, Google Maps, Apps