Si tienes internet rápido con el mejor plan de fibra, pero la conexión falla justo donde más la necesitas, es importante mencionar que la mayoría de los problemas con el WiFi no tienen que ver con tu operador, sino con algo mucho más básico, cómo y dónde tienes colocado el router. 

La buena noticia es que puedes mejorar la cobertura fácilmente. Y es que en muchas viviendas, sobre todo las que tienen varias habitaciones, muros gruesos o una distribución irregular, la señal del enrutador no llega con la misma fuerza a todas partes. 

Da igual que pagues por la máxima velocidad contratada, al final, si la señal no se reparte bien, la experiencia será frustrante. Por suerte, hay un truco tan simple y muy efectivo que puede multiplicar por diez el alcance del router WiFi, solo necesitas un dispositivo que puedes comprar por pocos euros.

¿Por qué el WiFi falla aunque tengas buena conexión?

La velocidad contratada con tu operadora solo sirve de algo si llega correctamente a todos los rincones de la casa. Pero lo que suele pasar es que el router no tiene la capacidad, la potencia o la posición adecuada para hacerlo.

Cabe señalar que las señales WiFi pierden fuerza al atravesar materiales como ladrillo, hormigón o madera. También se ven afectadas por interferencias de otros aparatos (microondas, teléfonos inalámbricos o incluso el Bluetooth). 

Y para rematar, muchos routers están mal ubicados, ya sea en una esquina, bajo una mesa o dentro de un mueble. Además, si el router es antiguo o no soporta los nuevos estándares inalámbricos, estarás limitado por mucho que contrates 1 Gbps de fibra.

La forma más efectiva y económica de resolver el problema es instalar un repetidor WiFi, el cual no se trata de magia ni de soluciones caseras. Es un dispositivo diseñado para extender la cobertura real de tu red inalámbrica.

Funciona captando la señal del router original y la vuelve a emitir con fuerza en zonas donde antes no llegaba. Sirve como puente, cubriendo huecos, esquinas, así como habitaciones sin cobertura. En menos de cinco minutos puedes eliminar las temidas “zonas muertas” y recuperar una conexión estable.

Para que funcione de verdad, es importante colocarlo a mitad de camino entre el router y la zona donde falla. Si lo pones demasiado lejos, no captará bien la señal o si lo pones muy cerca del router, no extenderá nada. Lo ideal es encontrar el punto justo donde aún llega bien la red y desde ahí reforzarla.

También debes asegurarte de que el repetidor sea compatible con tu red WiFi, donde lo mejor es apostar por modelos que soporten WiFi 5 (802.11ac) o directamente WiFi 6 (802.11ax) si ya has actualizado el router.

Qué hacer si el repetidor no es suficiente

Aunque el repetidor y el nuevo router pueden marcar un antes y un después, hay pequeños cambios que también suman. Reubicar el router en una posición central y elevada puede mejorar la cobertura sin necesidad de dispositivos adicionales. 

Asimismo, evita colocarlo junto a objetos metálicos, electrodomésticos o en esquinas cerradas. Del mismo modo, asegúrate de que el firmware del router esté actualizado. 

Las actualizaciones no solo corrigen fallos de seguridad, también mejoran el rendimiento, así como la estabilidad de la red. Y si vives en una zona con muchas redes cercanas, cambiar el canal de emisión puede reducir la interferencia y mejorar la calidad del WiFi.

En internet circulan muchos trucos caseros que prometen mejorar la señal con papel de aluminio, latas de refresco o elementos reciclados, pero la realidad es que la mayoría no tienen base técnica y, en el mejor de los casos, no sirven para nada. En el peor, pueden interferir o incluso bloquear parte de la señal.

El WiFi no mejora con objetos improvisados, sino que mejora cuando conoces su comportamiento, mides su intensidad o aplicas soluciones reales. Por eso, si quieres resultados visibles y duraderos, apuesta por tecnologías probadas y dispositivos diseñados específicamente para ello.

Tener una buena conexión no significa nada si el WiFi no llega donde lo necesitas. Por suerte, no hace falta invertir una fortuna, basta con un repetidor bien colocado, un router moderno con WiFi 6 y algunos ajustes clave, puedes transformar tu red doméstica. 

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Etiquetas: Router WiFi